¿Publicar o no publicar a tu pareja en redes sociales? Zenilda y el debate que sacudió Portadas al Día
El debate que todos necesitamos
El carismático personaje "Zenilda", encarnado por la animadora Mariela Celis, se presentó en el set de Portadas al Día para poner sobre la mesa un tema que resuena en casi todas las relaciones modernas: la presión de compartir a la pareja en redes sociales. Lo que comenzó como un sketch humorístico con la inconfundible escoba de Zenilda, rápidamente se transformó en un foro de discusión con el panel del programa y la participación de la sexóloga Eyra Morales.
Zenilda, con su estilo directo, no dudó en lanzar la pregunta del millón: ¿por qué no se publica a la pareja? "¿Será por feo, por viejo, por gordo? ¿Está casado, no está casado?", inquirió, desatando una conversación que explora desde la necesidad de validación hasta el puro y simple miedo a la crítica.
Validación vs. Protección: Las dos caras de la moneda
La sexóloga Eyra Morales aportó una perspectiva profesional y sensata al debate. Según ella, la sobreexposición en las redes a menudo esconde una necesidad de validación externa. Es como si la relación necesitara la aprobación pública para ser considerada "real". Morales subrayó un punto clave: la salud de una relación no se mide en likes, sino en la intimidad y la conexión que se construye fuera de la pantalla. "A veces hay que conservar en la intimidad, porque una relación no se mide en redes", enfatizó.
Pero la experta también señaló el otro extremo: el ocultamiento total puede generar desconfianza. Si una persona es muy activa en sus redes pero nunca menciona a su pareja, es natural que surjan preguntas. ¿Qué está escondiendo? Este comportamiento podría interpretarse como una falta de compromiso o, en casos más complejos, como la señal de que algo no anda bien en la relación.
El consenso: la importancia de los acuerdos mutuos
Los panelistas complementaron la visión de la especialista con sus propias experiencias. La mayoría coincidió en que la clave no está en una regla universal, sino en el acuerdo de la pareja. Si ambos están de acuerdo en mantener su vida en privado, no debería haber conflicto. El problema surge cuando solo una de las partes se siente cómoda con el anonimato digital, dejando a la otra con una sensación de no ser reconocida o valorada.
El consenso final apuntó hacia el equilibrio: no es necesario documentar cada momento, pero compartir ocasionalmente un instante especial puede ser una muestra de orgullo y compromiso. Lo crucial es que sea una decisión consensuada y que no provenga de la inseguridad o la presión social. Porque al final del día, las bases de una relación sólida —la confianza, la comunicación y el respeto— son mucho más valiosas que cualquier like o comentario en línea.
Para ver el debate completo y las divertidas ocurrencias de "Los Brollos de Zenilda", visita el canal de YouTube de "Portadas al Día".